Este Syrah viene del valle de Limarí, que se caracteriza tener cercanía al mar y por sus suelos calcáreaos que producen vinos minerales y frescos. Tuvo guarda de 10 meses en barrica francesa para darle mayor complejidad a su estructura.
En boca es de gran cuerpo, con intensos sabores a ciruelas y cerezas negras. Tiene un balance excepcional, que muestra todo el potencial del Valle del Limarí, otorgándole una gran estructura y un prolongado final en boca con notas frutales y a grafito.